Uno de los días mas esperado de la Semana Santa de Écija es la jornada del Martes Santo, donde tres imágenes de gran valía y especial devoción recorren las calles de Écija. El primer paso en salir fue el del Nazareno de la Misericordia, que este año estrenaba la cartela de la Santa Cena todo un conjunto que se está convirtiendo en una obra de arte a manos de Rafael Amadeo Rojas. Y es que tenemos que sentirnos privilegiados de contar con un artista de esta categoría en nuestra ciudad. El paso de misterio de las Negaciones y Lágrimas de San Pedro fue acompañado por Agrupación Musical "Paz y Caridad" Estepa (Sevilla). El paso de misterio cada año perfecciona la forma de andar, destacando actualmente como uno de los pasos que mejor andan.
Tras él vendrían numerosos capirotes rojos haciendo penitencia por Jesús en su último aliento, aunque sin aliento queda hasta el propio espectador tras ver tan perfecta e impresionante talla, que nos dejo Pedro Roldán, y es que Écija puede presumir orgullosa de contar con uno de los mejores crucificados de España. Como es habitual, la imagen fue bajada considerablemente para poder salir, protagonizando una complicada pero emotiva salida. La Banda de Cornetas y Tambores Stmo. Cristo de la Elevación. Campo de Criptana (Ciudad Real) puso los sones, banda de categoría cada vez mas ligada a la Hermandad de la Expiración. El monte de claveles rojos exornaba el paso del Santísimo Cristo de la Expiración, este año en un tono algo mas oscuro.
Por último vendría Nuestra Señora de los Dolores, elegante exorno floral en tonos blancos que cubría ese paso que trata de imitar el estilo Ecijano. Tras ella ponían los sones la Banda de Música AMUECI, la banda ecijana nunca defrauda. La Dolorosa llevo marchas alegres, abandonando su elegantísimo repertorio entre lo fúnebre y lo clásico que venia llevando años atrás. Y es que no olvidemos que Santiago siempre a sido una Hermandad seria. Los barrios en el centro de la ciudad no existen. Muy comentado la forma de andar del paso. Tras una larga estación de penitencia y cumplir por completo el recorrido que el año pasado la lluvia no les dejo, si que llovió una gran petalada sobre tan bella imagen en el estrechillo que da acceso a la Plaza de Santiago. Tras doble interpretación de Callejuela de la O, entre algunos aplausos hizo su entrada al templo.
Totalmente recomendable ver el transitar de esta Cofradía bajo el arco de Santa María, impresionante...
Y así acabo un Martes Santo para el recuerdo, donde una vez mas San Pedro negó a la Misericordia de Jesús, Dios hecho madera expiro su último aliento y su bendita Madre le observo con su tierna mirada, sintiendo el mayor de los dolores, como si una espada su pecho atravesara.
Nuestra Señora de los Dolores fue ataviada por D. Manuel Jiménez García, con bastante buen gusto recupero para la salida el tocado a tablas que ya hacia años que no lucia, en color dorado realzaba aún mas la belleza de la imagen. Corazón con puñal atravesado, mariquillas y la medalla de la ciudad. Sus brazos exageradamente abiertos y el manto caído. Saya completamente bordada en oro, de las mejores del extenso ajuar de la Virgen. A sus pies impresionante orfebrería, media luna de plata de ley... a destacar también el juego de corona y resplandor de las mismas características. Enhorabuena al vestidor y la Hermandad, Nuestra Señora de los Dolores se presentaba magnifica aquel día.
Y sobre todo enhorabuena por la estación de penitencia, que difícilmente se olvidara de las memorias de todos aquellos que tuvimos la suerte de vivirlo.
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